Una instalación artística es un género de arte contemporáneo que comenzó a tomar un fuerte impulso a partir de la década de 1960. Las instalaciones incorporan cualquier medio para crear una experiencia visceral o conceptual en un ambiente determinado. Los artistas de instalaciones por lo general utilizan directamente el espacio de exposición, a menudo la obra es transitable por el espectador y éste puede interaccionar con ella. Las intervenciones en espacios naturales que incorporan el paisaje como parte integrante de la obra suelen enmarcarse en el denominado Land Art o arte de la tierra.
Puede incluir cualquier medio, desde materiales naturales hasta los más nuevos medios de comunicación, tales como video, sonido, computadoras e internet, o incluso energía pura como el plasma.
Algunas instalaciones son sitios específicos de arte, sólo pueden existir en el espacio para el cual son creadas.
Sus primeras obras, todas realistas, representan escenas. Influido por el surrealismo, pinta cuadro como La loba (1943, Museo de Arte Moderno, Nueva York). En 1947, elimina de sus obras todo símbolo reconocible y empieza a pintar composiciones absolutamente abstractas por medio de una técnica que ha de convertirse en leyenda junto con el propio artista: el dripping o chorreado. Consiste en gotear y salpicar la pintura sobre una tela sin tensar colocada en el suelo en lugar de los tradicionales pinceles.
La materia pictórica (que no suele ser óleo, sino algún tipo de esmalte opaco o barniz industrial, como los usados por primera vez por el propio Pollock en torno a 1947) se deja gotear sobre la tela extendida en el suelo desde un contenedor agujereado o se esparce mediante salpicaduras, directamente con las manos o mediante el uso de pinceles o cualquier otro instrumento.
En los años cincuenta y los sesenta, el dripping fue frecuentemente empleado por los movimientos informatistas europeos.
El concepto de arte visual se encuentra formado por dos términos bien diferenciados, que explicaremos a continuación: arte y visual.
Arte es una palabra que sirve para referirse a aquellas creaciones hechas por el hombre, a través de las cuales manifiesta su visión sensible del mundo, ya sea real o imaginario. Para ello, el artista se apoya en una serie de recursos que se encuentran a su disposición; los mismos pueden ser plásticos, lingüísticos o sonoros. El arte nació con una función ritual o mágica y fue mutando hasta convertirse en una cuestión estética y hasta recreativa.
El término visual proviene de un vocablo latino que se encuentra vinculado con lo perteneciente o relativo a la visión (sentido que permite detectar e interpretar la luz y la capacidad propia de ver que tienen los seres vivos del reino animal gracias a sus sistemas naturales).
Teniendo en cuenta estas aclaraciones podemos decir que arte visual es un término relacionado con aquellas obras que pueden apreciarse fundamentalmente por la capacidad de la vista, como la pintura, la fotografía o el cine (aunque éste también incluye sonido). Las obras en tres dimensiones, como las esculturas, suelen ser incluidas en el grupo de las artes plásticas. De todas formas, existen indisciplinaras que reciben el nombre de visuales, porque combinan diversas técnicas para que la obra pueda apreciarse de una forma más amplia; tal es el caso de la poesía visual.
El concepto de arte visual surgió tras la Segunda Guerra Mundial para nombrar a las artes que implican una percepción visual. La pintura (que puede apreciarse a partir de los pigmentos que se aplican sobre una superficie) y la fotografía (la grabación de patrones de luz en un medio sensible), pues, son dos de los máximos exponentes de este tipo de arte.
La composición del arte visual se desarrolla atendiendo diversas cuestiones, como la relación entre figura y fondo (para incidir en la percepción de lo visto), el contorno, la agrupación de los elementos (por proximidad, continuidad o semejanza) y la pregnancia.
La poesía visual
La poesía visual es una rama de la expresividad poética que se combina con otras artes, como la pintura, la fotografía o incluso el teatro; pertenece al conjunto de disciplinas que se encuentran incluidas en la poesía experimental, a la que también pertenecen (la poesía fonética y la poesía objetual).
Los poetas visuales en lugar de desarrollar poemas basados en una idea y plasmarla únicamente a través de las palabras, la fusionan con figuras, movimientos y otros recursos que permiten que los receptores de dicha poesía puedan apreciarla desde diversas perspectivas.
El origen de este arte visual es tan antiguo como la poesía en sí misma. Deberíamos viajar al 300 a.C, época en la que en Grecia el poeta Simmias de Rodas escribió versos en forma de caligramas. Se trataba de un pequeño poema sin un orden predeterminado: podía leerse de diversas formas adquieriendo sentidos muy variados.
Posteriormente autores comoApollinaire, Guillem Viladot y José Juan Tablada fueron los encargados de retomar la estética de Simmias y convertir este tipo de poesía experimental en una disciplina más dentro de las múltiples formas que ha tomado la poesía a lo largo del tiempo y en todo el mundo.
En la actualidad la poesía visual se encuentra muy presente en los nuevos medios de comunicación; gracias a las redes sociales este tipo de arte visual tiene un espacio propicio para su difusión instantánea a lo largo y ancho de todo el mundo y un amplio público que disfruta de ella.